Todo mundo le perdió el respeto ya al otrora poderosísimo operador, paisano y hermanazo de la vidaza del patriarca fundador del primer piso de la cuatroté. Una barredora se llevó la deferencia con la que lo trataban sus correligionarios y los dos centavos de autoridad que le quedaban.

Adán Augusto López, coordinador de la bancada de Morena en el Senado por imposición del ex presidente Andrés López, recibió en un solo día tres golpazos de realidad que lo bajaron de su nube.

El primer manotazo de la rebelión en su fracción parlamentaria se dio la mañana del pasado jueves, en la reunión con la bancada previa a la sesión del Pleno. A propuesta de Guadalupe Chavira, los 67 senadores de bancada acordaron que las decisiones del grupo se tomarán en urnas, por voto directo y secreto de los 67 integrantes.  
“Estamos estrenando el voto libre y secreto en urnas. Ya no son los acuerdos que en su momento podíamos tener de él en su calidad de coordinador”, dijo la senadora Chavira. 
Incluso trascendió que los morenistas “le leyeron la cartilla” al ex secretario de Gobernación, y que en esa reunión Chavira le espetó: “Tu situación es muy complicada”, en referencia al caso de quien fue su secretario de Seguridad cuando gobernó Tabasco, Hernán Bermúdez Requena, presunto líder del cártel La Barredora.  
Adán debió aceptar los términos y condiciones que sus senadores le impusieron esa mañana. Pero no quedó ahí. 
Ese día, más tarde, el ex panista neo morenista Javier Corral se le subió a las barbas a Adán: en su calidad de presidente de la Comisión de Justicia, dio una conferencia para anunciar que impulsará un parlamento abierto sobre la iniciativa de reforma de la presidentA Claudia Sheinbaum a la Ley de Amparo, contradiciendo la negativa que había dado Adán a someter a consulta esa propuesta.   
“Estamos buscando un acuerdo los tres presidentes de las comisiones, el senador Enrique Inzunza, el senador Miguel Ángel Yunes y un servidor… para trazar una ruta de dictaminación en la modalidad que sea, se le llame consulta a expertos o consulta a ciertos actores o parlamento abierto”, dijo el chihuahuense. 
Todavía se puso peor, ese jueves, para Adán. En la Junta de Coordinación Política, que integra a los líderes de todas las bancadas del Senado, echaron a la basura su plan para cancelar los viajes internacionales de los senadores. 
Ni los coordinadores del PVEM, Manuel Velasco, ni del PT, Alberto Anaya, aliados de la cuatroté, respaldaron su propuesta. Hasta lo mandaron a informar a los medios que su plan había fracasado.
Jueves negrísimo para Adán Augusto, justo el mismo día en que Bermúdez Requena llegó a México, expulsado por Paraguay, y fue encerrado en una celda del penal de Almoloya.
Y en política, se sabe, no hay coincidencias, aunque en el discurso defienden a Adán hasta en Palacio Nacional.  

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