Y sin decir agua va, se fue Rodrigo Castañeda, quien llevaba desde el inicio del sexenio, administrando la secretaria de economía del estado de zacatecas. El cambio parecería sorpresa, pero la realidad dicen, es que era insostenible, desde hace mucho tiempo en el puesto como secretario. La falta de conocimiento en materia de economía, la falta de atención a los empresarios, comerciantes y emprendedores, la no empatía con el sector empresarial y económico del estado, provocó que las cámaras empresariales, agrupaciones de comerciantes y líderes del tema, dejaran de participar y porque no decirlo, la no llegada de inversiones tanto nacionales como extranjeras. Quien llega tiene experiencia, pero no en el tema de desarrollo económico gubernamental, le faltarán consejeros para intentar levantar el ánimo y la economía, por no decir el desastre que su antecesor le deja. Aún como secretario de finanzas en la administración anterior, Miranda promovió la desaparición de los fideicomisos, uno de ellos muy importante que aún subsiste, es el del impuesto sobre la nómina, que fue usado para gasto corriente y desahogar las finanzas estatales, en temas diferentes a la economía y desarrollo económico. Cuenta la leyenda que el ex secretario de economía, Bárcena Pous, se quejó en su momento de que Miranda no le liberaba los recursos para el pago de incentivos a la inversión de empresas de los parques industriales y por ello la molestia de estas empresas. Como dice un importante empresario zacatecano “No es lo mismo ser borracho que cantinero“